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Con el objetivo de difundir las artes marciales chinas en el país, Pamela Ortega y su maestro Fernando Guajardo volvieron a Chile tras haber estado un año estudiando y perfeccionándose en la Universidad de Deportes de Beijing en la práctica del Wushu.

 

La estadía de los viñamarinos en Asia no fue fácil, debido a las diferencias culturales con Chile.

 

"Fue una experiencia muy enriquecedora, pero complicada para nosotros. Es que el entrenamiento en China es muy duro y sumamente riguroso, especialmente en el templo de Wudang, donde la jornada comienza a las cinco de la mañana. Pero entregan mucho a la parte del desarrollo personal, además del tema de la riqueza técnica que es muy efectiva en el Tai-Chi y el Kung Fu", explica Pamela Ortega, quien junto a Guajardo se convirtieron en los primeros jueces chilenos reconocidos por la Federación Internacional de Wushu, distinción que los convierte en las personas mejor calificadas para preparar a competidores y árbitros de artes marciales chinas en en el país.

 

"Volvimos con la misión de difundir esta disciplina. Esa es una de las tareas que nos dejaron allá en China para ir mejorando paulatinamente el nivel de competidores y jueces que están vinculados al Wushu moderno", indica Fernando Guajardo, que lleva más de 30 años dedicado a la práctica de artes marciales y a la formación de deportistas en la región.

Hasta el próximo miércoles se realizará el primer Seminario de Wushu en Viña del Mar. La cita de las artes marciales es en el Polideportivo de la Ciudad Jardín y contará con la presencia internacional de la maestra y directora de la Universidad del Deporte de Beijing, Li Qiaoling.

Para el maestro Fernando Guajardo, organizador y referente del Wushu Kung Fu y Tai Chi nacional, "es una oportunidad para estrechar lazos con una disciplina marcial que recién está comenzando a ser descubierta en nuestro país. Esperemos que pueda participar mucha gente, ya que contaremos con la presencia de la maestra Li Qiaoling".

Por otra parte, la maestra Li se mostró muy sorprendida y agradecida de la invitación al evento. "Como directora de la Universidad del Deporte de Beijing (China) tengo contactos con el Centro Cultural Chino de Viña del Mar. Ellos me invitaron y acepté. Siempre es importante visitar otro país y mostrar el respeto que caracteriza el Wushu como arte marcial".

El seminario contará con varios invitados extranjeros. Estos han llegado a Chile sólo por la importancia, respeto y admiración que sienten por la maestra China. Jorge Daniel Buza es uno de ellos. El argentino, proveniente de Lanús, Buenos Aires, dice estar muy contento de participar en algo "que no se da frecuentemente en Latinoamérica".

En tanto, para Pamela Ortega, discípula del maestro Fernando Guajardo, el seminario es una oportunidad para  relacionar desde la fuente las artes marciales con Chile: "La idea de la organización es seguir incentivando en la comunidad la cultura, el arte y técnica de una disciplina hasta ahora desconocida en nuestro país. Esperamos que este sea uno de muchos encuentros, no sólo en Chile sino también en Latinoamérica".